lunes, 28 de enero de 2013

Crónicas de un Viaje: ‘Al Mawlid al-Nabawi’ o El Nacimiento del Profeta_23-01-2013: PRIMERA ETAPA: BORDJ BOU ARÉRRIDJ. De la truncada llegada a Sétif y otras historias policíacas.

Todo comenzó el miércoles 23 de enero por la tarde, al salir del trabajo, en Argel, desde donde pretendíamos abordar nuestra primera salida rodada por Argelia, en este caso hacia el este del país.

Dos turismos en busca de Sétif, Djemila y Constantine.

Pero el invierno se cruzó en nuestro camino y nos hizo detener nuestro periplo en Bordj Bou Arréridj, ciudad a mitad de camino entre Argel y Sétif y hasta donde nos dejó llegar la escolta que nos abría camino ya que, siempre según su relato, la autopista se encontraba cerrada y era imposible llegar a Sétif.

Así que, hacia las 22:30 de la noche, tras cuatro horas de ruta para recorrer apenas doscientos kilómetros, tras tres cambios de escolta y en medio de una planicie helada donde paramos a repostar y evacuar, entre un aseo que merece el título del más desagradable del universo -os voy a ahorrar la foto- y viendo pasar al Madrid a semifinales de la copa, las fuerzas del orden que nos escoltaban nos acompañaron a este bonito hotel que acompaño.
La noche no dio mucho más de sí ya que todo estaba cerrado y tuvimos que calmar nuestros voraces estómagos  con unas porciones de queso, chopped de pavo y atún con tomate que pudimos comprar en la última épicerie abierta en varios kilómetros a la redonda. Tras la ingesta de tales viandas acompañadas del pan sobrante del día que tuvo a bien ofrecernos el recepcionista del hotel, nos dirigimos a la cama  a la espera de que el día amaneciera despejado.
Y así amaneció. Más negro que en la boca del nobo. Estas son las vistas de y desde la habitación, de una ciudad donde lo más reseñable es el parque de atracciones con montaña rusa incluida que, al parecer, teníamos a escasos metros de nuestro hotel.


Buen aseo y correcto desayuno que nos sirvió para retomar fuerzas y empezar un nuevo día sin saber todavía si podríamos entrar en Sétif, acceder a las ruinas romanas de Djemila o llegar, siquiera, a nuestra pretendida meta: Constantine. Eso sí, íbamos a tener conocimiento de primera mano de lo que es hacer un viaje por tierra por Argelia, disfrutando de tal variedad de escoltas en número, clase y motorización que bien podría hacerse una nueva entrega de Loca Academia de Policía aunque cambiando el 9 mm. Parabellum de Whitaker por un rifle de asalto semiautomático de fabricación rusa.
Así que aquí os dejo con Isaac, al frente del volante del equipo A, en nuestro flamante Hyundai Accent, con el que viviríamos unas próximas 36h. bastante animaditas.

Seguiremos informando. El viaje no ha hecho más que empezar...



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